Para el acabado de nuestros productos utilizamos diversas técnicas de impresión, en las que los factores físicos y técnicos de impresión pueden influir en la imagen impresa o modificar el resultado, especialmente en el espectro de colores perceptibles.

La impresión textil suele utilizar pigmentos de color, que sólo son eficaces si destacan lo suficiente del color de fondo. Cuando se imprime sobre textiles, la tinta debe ofrecer suficiente contraste con el color base del tejido para que el diseño sea visible. Si, por ejemplo, se imprime un texto negro sobre una superficie negra, no destacará lo suficiente y, por tanto, no se reconocerá el elemento de texto diseñado. Esto también se aplica a todos los colores de impresión que coincidan con el color del producto (por ejemplo, naranja sobre naranja, amarillo sobre amarillo, etc.).

Las condiciones físicas también pueden influir, como en el caso de la impresión por sublimación. En este proceso, el color blanco no puede sublimarse sobre un fondo blanco, ya que permanece invisible y no se transfiere.

Por tanto, recomendamos crear una gradación de contraste ajustando la selección de colores, por ejemplo, utilizando texto blanco sobre fondo negro o motivos negros, así como textos o motivos de color sobre fondo blanco.